El 21 de abril de 2025, a las 7:35 de la mañana, el mundo recibió la noticia que estremeció a millones: el Papa Francisco, líder de la Iglesia Católica y símbolo global de humildad y compasión, falleció a los 88 años en su residencia en la Casa Santa Marta, Vaticano (Reuters). Su muerte, probablemente causada por complicaciones respiratorias derivadas de una doble neumonía, marcó el fin de un papado que transformó la Iglesia y tocó corazones en todo el mundo.
Los últimos días
En sus últimos días, el Papa Francisco mostró una fortaleza admirable a pesar de su frágil salud. El 20 de abril de 2025, domingo de Resurrección, delegó la misa pascual al cardenal Angelo Comastri, pero sorprendió al mundo al aparecer en la Plaza de San Pedro para bendecir a los fieles y reunirse con el vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance (AP News). Esta fue su primera aparición pública desde su hospitalización el 14 de febrero de 2025, cuando una crisis respiratoria derivó en una doble neumonía que lo llevó al borde de la muerte (NY Times).
Tras 38 días en el hospital Gemelli de Roma, fue dado de alta el 23 de marzo de 2025, con la recomendación de descansar al menos dos meses en la Domus Sanctae Marthae (BBC). Sin embargo, su condición respiratoria crónica, resultado de la extirpación parcial de un pulmón en su juventud, lo hacía vulnerable a infecciones. El 21 de abril, a las 7:35 AM, falleció, según anunció el cardenal Kevin Farrell: “Con profundo dolor debo anunciar la muerte de nuestro Santo Padre Francisco. Su vida entera estuvo dedicada al servicio del Señor y de su Iglesia” (Vatican News).
Causa probable de la muerte
La causa más probable del fallecimiento fue una complicación respiratoria agravada por la doble neumonía de febrero de 2025. Francisco sufría de daños pulmonares crónicos desde joven, cuando una infección grave requirió la extirpación de parte de un pulmón (Wikipedia). En los últimos años, era propenso a infecciones respiratorias, y en febrero de 2025 padeció una infección polimicrobiana, neumonía bilateral, insuficiencia respiratoria aguda e insuficiencia renal incipiente (CNN). Aunque se recuperó lo suficiente para salir del hospital, su salud seguía siendo delicada, y su médico, el Dr. Sergio Alfieri, describió su supervivencia como “un milagro” (NY Times).
Apuntes biográficos
Jorge Mario Bergoglio nació el 17 de diciembre de 1936 en el barrio obrero de Flores, Buenos Aires, hijo de inmigrantes italianos. Su padre, Mario, era trabajador ferroviario, y su madre, Regina Sivori, ama de casa (Vatican). Estudió como técnico químico, pero a los 21 años, tras una grave enfermedad pulmonar, sintió el llamado al sacerdocio y entró en la Compañía de Jesús en 1958. Fue ordenado sacerdote en 1969 y ocupó roles clave, como provincial de los jesuitas en Argentina durante la dictadura militar (1976-1983).
Durante ese período oscuro, Bergoglio actuó discretamente para salvar vidas. Según su biógrafo autorizado, Sergio Rubin, intercedió ante el dictador Jorge Rafael Videla para liberar a sacerdotes detenidos y escondió a perseguidos en propiedades eclesiásticas, incluso cediendo su propia identidad a un hombre para que huyera (Wikipedia). Alicia Oliveira, exjueza argentina, lo describió como “angustiado” y “muy crítico de la dictadura” (Wikipedia).
Como arzobispo de Buenos Aires (1998-2013), vivió en un modesto apartamento, cocinaba sus propias comidas y viajaba en transporte público, ganándose el cariño de su diócesis. “Mi pueblo es pobre y yo soy uno de ellos”, decía (Vatican). Su elección como Papa en 2013, tras la renuncia de Benedicto XVI, marcó un hito: fue el primer Papa jesuita, el primero de América Latina y el primero en adoptar el nombre de Francisco, en honor a San Francisco de Asís.
Compromiso con la comunidad LGTBI
Francisco abogó por una Iglesia más inclusiva, especialmente hacia colectivos tradicionalmente marginados como la comunidad LGTBI. En 2013, durante un vuelo de regreso de Brasil, pronunció una frase que resonó globalmente: “Si una persona es gay y busca a Dios con buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla?” (HRC). Esta declaración, que usó la palabra “gay” por primera vez en boca de un Papa, fue celebrada por grupos como Gay Catholic Voice Ireland como un paso hacia la inclusión (Wikipedia).
Aunque mantuvo la doctrina de la Iglesia que considera los actos homosexuales como pecado, Francisco condenó las leyes que criminalizan la homosexualidad como “injustas” y llamó a los obispos a acoger a las personas LGTBI con “ternura” (USCCB). En 2021, apoyó las uniones civiles para parejas del mismo sexo, diciendo que son “buenas y útiles para muchas personas” (Forbes). También se reunió con personas transgénero y grupos LGTBI, marcando una ruptura con el lenguaje más duro de sus predecesores, como Benedicto XVI, quien calificó la homosexualidad como una “tendencia hacia un mal moral intrínseco” (Forbes).
Carácter reformista y renovación interna
Francisco fue un Papa reformista que buscó modernizar una Iglesia en crisis tras escándalos financieros y de abusos. Implementó cambios radicales en el Banco Vaticano para erradicar la corrupción, asegurando que “no es posible que el dinero de la mafia fluya por el Vaticano” (NPR). Su constitución apostólica Praedicate Evangelium (2022) reorganizó la Curia Romana, promoviendo un modelo colegial inspirado en el Concilio Vaticano II (Religion News).
El Sínodo de Obispos, iniciado en 2021, fue su herramienta principal para involucrar a católicos de todo el mundo en debates sobre reformas, como el rol de las mujeres y la inclusión LGTBI (Reuters). Aunque no ordenó mujeres como diaconisas, abrió espacios para su participación en la gobernanza eclesiástica (CBS News). También modificó enseñanzas sobre la pena de muerte y las armas nucleares, aunque mantuvo la postura contra el aborto (AP News).
Lucha contra la pederastia
Francisco enfrentó el escándalo de la pederastia con medidas significativas, aunque no exentas de críticas. En 2019, abolió el secreto pontificio que protegía a los abusadores, facilitando el acceso de víctimas y autoridades a información (NPR). En 2021, actualizó el código penal eclesiástico, estableciendo penas severas para sacerdotes que abusen de menores (France24).
En 2017, reconoció que la Iglesia actuó tarde: “La conciencia de la Iglesia llegó un poco tarde” (Washington Post). Describió la pederastia como una “enfermedad” y prometió enfrentarla con severidad. Sin embargo, algunos críticos, como los autores de informes de la ONU, señalaron que la Iglesia aún necesitaba mayor transparencia (Independent).
Condena a las matanzas en Gaza
Francisco fue un firme defensor de la paz, y sus condenas a la violencia en Gaza reflejaron su compromiso con la justicia. En diciembre de 2024, denunció la “crueldad” de los ataques israelíes, lamentando el asesinato de niños y los bombardeos de escuelas y hospitales: “Esto no es guerra, es crueldad” (France24). En noviembre de 2024, pidió investigar si las acciones de Israel constituían genocidio, citando expertos que veían “características de genocidio” (Al Jazeera).
En diciembre de 2023, condenó un ataque israelí a la parroquia de la Sagrada Familia en Gaza, que mató a dos mujeres cristianas: “Allí no hay terroristas, sino familias, niños, enfermos” (Vatican News). Estas declaraciones generaron tensiones con Israel, cuyo Ministerio de Exteriores acusó a Francisco de “doble rasero” (Times of Israel).
Humanismo y valores cristianos
El humanismo de Francisco, inspirado en su formación jesuita y su experiencia durante la dictadura argentina, se reflejó en su énfasis en la misericordia y la justicia social. Su lema papal, miserando atque eligendo (“con misericordia, lo eligió”), encapsuló su visión de una Iglesia “herida, que sale a las calles” (USCCB). Su vida sencilla como arzobispo y Papa, rechazando lujos y viviendo entre los fieles, lo convirtió en un símbolo de humildad.
Sus reformas, su apertura a los marginados, su lucha contra la pederastia y su defensa de la paz en Gaza fueron expresiones de su creencia en la dignidad de cada persona. Como dijo en su encíclica Laudato si’ (2015), “una verdadera ecología humana” requiere cuidar tanto del planeta como de los más vulnerables (Britannica).
Testimonios de quienes lo conocieron
Quienes conocieron a Francisco destacaron su empatía y compromiso. Sergio Rubin, su biógrafo, relató cómo arriesgó su vida para proteger a perseguidos durante la dictadura (Wikipedia). Alicia Oliveira lo describió como un hombre “angustiado” por las injusticias de su tiempo. En su autobiografía Hope (2025), Francisco reflexionó sobre su papado, admitiendo resistencias pero reafirmando su fe en la misericordia (AP News).
El cardenal Kevin Farrell, al anunciar su muerte, lo elogió como “un verdadero discípulo de Jesús” que enseñó “los valores del Evangelio con fidelidad, valentía y amor universal” (Vatican News). Incluso líderes mundiales, como el presidente francés Emmanuel Macron, lo recordaron como “un gran hombre, un pastor que tenía sentido de los más frágiles” (The Guardian).
Conclusión
La muerte del Papa Francisco cierra un capítulo de renovación y esperanza en la Iglesia Católica. Su legado, marcado por la humildad, la inclusión y la lucha por la justicia, perdurará en los corazones de millones. Como él mismo dijo, “la misericordia es el camino que une a Dios y al hombre” (Vatican). Su vida fue un testimonio vivo de esa verdad.
| Aspecto | Contribución clave | Impacto |
|---|---|---|
| Inclusión LGTBI | Frase “¿Quién soy yo para juzgar?”; apoyo a uniones civiles | Mayor apertura, aunque con tensiones doctrinales |
| Reformas eclesiásticas | Reforma del Banco Vaticano; Sínodo de Obispos; Praedicate Evangelium | Mayor transparencia y participación, pero resistencias internas |
| Lucha contra pederastia | Abolición del secreto pontificio; actualización del código penal | Avances en justicia para víctimas, aunque críticas por lentitud |
| Condena a violencia en Gaza | Denuncias de “crueldad” y posible genocidio | Llamado a la paz, pero tensiones diplomáticas con Israel |
| Humanismo | Vida sencilla; énfasis en misericordia y justicia social | Inspiración global para una Iglesia más cercana a los pobres |
