El sábado 31 de mayo de 2025, la plaza Rovira i Trias, en el corazón del barrio de Gràcia de Barcelona, se convirtió en un escenario de emoción y memoria colectiva. Bajo un sol radiante y un ambiente cargado de nostalgia, se inauguró un monolito conmemorativo dedicado al cantautor, poeta y artista total Luis Eduardo Aute. Este acto, largamente esperado por los vecinos y seguidores del artista, marcó el cierre de una lucha de años liderada por la Plataforma Aute Plaza Rovira para honrar al “gracienc más universal” en el lugar que inspiró su emblemática canción Somnis de la plaça Rovira. A continuación, relatamos los detalles de una jornada que unió música, poesía y recuerdos en un tributo inolvidable.
El contexto: Aute y su vínculo con Gràcia
Luis Eduardo Aute, nacido en Manila en 1943 y fallecido en Madrid en 2020, fue mucho más que un cantautor. Su obra, que abarca música, poesía, pintura y cine, dejó una huella imborrable en la cultura hispana. Pero fue en el barrio de Gràcia, donde pasó parte de su infancia, donde Aute forjó un vínculo especial que perduró toda su vida. La plaza Rovira i Trias, con su ambiente bohemio y sus comercios históricos como el bar Casa Vall, se convirtió en un refugio de memorias que el artista plasmó en Somnis de la plaça Rovira, una canción en catalán estrenada en 2010 durante la Fiesta Mayor de Gràcia. En ella, Aute evocaba con ternura los días de su niñez, declarando: “El meu barri de veïns és aquest”.
La idea de rendir homenaje a Aute en esta plaza comenzó poco después de su muerte, impulsada por su prima hermana, Lluïsa Gozalbo Aute, y la vecina Anna del Blanco, líder de la Plataforma Aute Plaza Rovira. A pesar de las trabas burocráticas del Ayuntamiento de Barcelona, que inicialmente rechazó instalar una placa por motivos normativos, la perseverancia de la plataforma y el apoyo de más de 1.400 firmas, incluyendo las de figuras como Joan Manuel Serrat y Silvio Rodríguez, culminaron en la aprobación del monolito.
La jornada: un acto lleno de simbolismo
El acto de inauguración comenzó a mediodía, con la plaza Rovira i Trias abarrotada de vecinos, admiradores y autoridades. La escultura, un tótem compuesto por dos planchas de aluminio, se erigió en el centro de la plaza, diseñada cuidadosamente para no interferir con la estatua de Antoni Rovira i Trias ni con las futuras decoraciones de la Fiesta Mayor. Una de las planchas reproduce el estribillo de Somnis de la plaça Rovira, acompañado de una breve biografía de Aute y su icónico símbolo del “beso infinito”, una firma que encapsula su filosofía de amor y conexión.
El evento, organizado por la colla de diables de la Malèfica del Coll y la Associació de Veïns de la Plaça Rovira, tuvo un carácter abierto y comunitario. La presencia de la familia de Aute añadió un toque de intimidad: Miguel Aute, hijo del cantautor, y José Ramón Aute, su hermano, compartieron anécdotas personales, mientras Lluïsa Gozalbo Aute, de 100 años, observaba con orgullo desde una terraza cercana, donde desayuna cada mañana. La emoción fue palpable cuando Anna del Blanco, promotora incansable del homenaje, tomó la palabra para recordar los años de lucha y el significado de este reconocimiento. “No es solo por Luis, es por lo que Gràcia representa: un barrio que abraza a sus artistas y sus historias”, afirmó.
El concierto: la música de Aute resuena en la plaza
El punto álgido de la jornada fue el concierto a cargo de Joan Sebastià Sansó y Estela Navarro, quienes interpretaron un repertorio cuidadosamente seleccionado por la familia de Aute. Las notas de Somnis de la plaça Rovira llenaron el aire, transportando a los presentes a los recuerdos de infancia del cantautor. Canciones como Al alba y Rosas en el mar también resonaron, evocando la sensibilidad poética y el compromiso social de Aute. La actuación no solo celebró su legado musical, sino que también destacó su faceta literaria, reconocida por la distinción de Barcelona como Ciudad Literaria por la UNESCO.
El poeta Ángel Petisme, amigo cercano de Aute, participó recitando “poemigas” y versos dedicados al homenajeado, mientras Enric Hernàez e Imma Sust, miembros de la plataforma, aportaron lecturas de textos poéticos de Aute. La plaza vibró con una mezcla de generaciones: desde vecinos mayores que recordaban a un joven Aute paseando por Gràcia hasta jóvenes que descubrieron su obra a través de la iniciativa.
La plaza Rovira i Trias: un escenario con historia
La elección de la plaza Rovira i Trias no fue casual. Urbanizada en 1861 por Antoni Rovira i Trias, este espacio es el corazón de la parte alta de Gràcia, un enclave que conserva el encanto de su pasado como villa independiente. Con su escultura de bronce de Rovira i Trias sentado en un banco, la plaza es un punto de encuentro histórico, inmortalizado en obras como El embrujo de Shanghai de Juan Marsé y Tentativa de agotar la Plaza Rovira de Enrique Vila-Matas. La incorporación del monolito de Aute refuerza su papel como un “territorio de vida”, como lo describió el activista cultural Oscar Abril Ascaso, un lugar donde la cultura y la comunidad se entrelazan.
La plaza, rodeada de edificios modernistas y terrazas, ha sido escenario de la Fiesta Mayor de Gràcia, donde Aute cantó altruistamente en 2006 y 2007, consolidando su conexión con el barrio. Su decoración durante estas fiestas, como la temática de mariposas “Alis volat propiis” en 2023, refleja el espíritu creativo que Aute tanto admiraba. El monolito, estratégicamente ubicado, se integra en este entorno sin alterar su esencia, convirtiéndose en un nuevo símbolo de la identidad graciense.
Reacciones y legado
La inauguración generó una oleada de reacciones en redes sociales y medios locales. Usuarios como @lady_marga73 celebraron el logro tras “años de lucha” contra las negativas del Ayuntamiento, mientras @btvnoticies destacó la relevancia de Somnis de la plaça Rovira como un himno del barrio. @Marcgenealogia, miembro de la comisión de nomenclátor de Junts per Catalunya, describió el acto como “muy emotivo”, resaltando la presencia de tres generaciones de la familia Aute.
El monolito no solo honra a Aute, sino que también refuerza el compromiso de Barcelona con su legado cultural. Como señaló Anna del Blanco, la plaza Rovira i Trias ahora está “en el mapa del mundo” gracias a la canción de Aute, un reconocimiento que trasciende lo local para celebrar a un artista universal. La iniciativa también inspira a futuras generaciones a conocer la obra de Aute, desde sus canciones hasta sus poemigas y pinturas, asegurando que su legado perdure.
Impacto cultural y social
El homenaje a Aute trasciende el acto en sí. En un barrio donde la gentrificación amenaza la autenticidad, la plaza Rovira i Trias sigue siendo un bastión de la vida comunitaria. La instalación del monolito reafirma su papel como un espacio donde la memoria colectiva se encuentra con la creatividad. Además, el reconocimiento a Aute como poeta y narrador refuerza la importancia de Gràcia como cuna de artistas que han transformado los espacios urbanos en obras universales.
El evento también puso de manifiesto la fuerza de las iniciativas ciudadanas. La Plataforma Aute Plaza Rovira, con el respaldo de vecinos y artistas, logró superar las barreras burocráticas, demostrando que la voluntad colectiva puede mover montañas. La presencia de figuras como Lluïsa Gozalbo Aute, quien a sus 100 años sigue siendo un símbolo de resistencia, añadió un peso emocional al acto, recordando que el legado de Aute es también el de una comunidad unida.
Conclusión
La inauguración del monolito a Luis Eduardo Aute en la plaza Rovira i Trias el 31 de mayo de 2025 fue más que un acto conmemorativo; fue una celebración de la vida, el arte y la memoria de un creador que encontró en Gràcia un hogar y una musa. Con el monolito como nuevo guardián de la plaza, la voz de Aute seguirá resonando en cada esquina, en cada terraza, en cada acorde de Somnis de la plaça Rovira. Este homenaje, fruto de la tenacidad de los vecinos y el amor por un artista universal, asegura que el “beso infinito” de Aute perdure en el corazón de Barcelona, uniendo generaciones en un abrazo eterno.
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.