Marguerite Yourcenar anota en su cuento que, en efecto, «Homero ya sabía cómo ven consumirse su inteligencia y sus fuerzas aquellos que se acuestan con las diosas de oro». Y quizás esto no sea sino decir, como Pantea, «¡llévatelo contigo, oh naturaleza! Efímeros son tus preferidos». En El hombre que […]