Las Asociaciones Federadas de Familias de Alumnos de Cataluña (aFFaC) estiman que las cuotas escolares se han encarecido entre un 5 y un 10% en los últimos años y avisan de que cada vez son más las familias que no pueden pagarlas. La entidad calcula que, en los centros públicos, se destinan unos 300 euros por hijo a pagar las cuotas, una cifra que aseguran que se ha agravado con la inflación. En una entrevista a la ACN, la presidenta de la asociación, Belén Tascón, lamenta que el vale de 100 euros impulsado desde el Gobierno no ha servido para paliar los gastos de la vuelta a la escuela, ya que en muchos casos son los centros quienes cobran el material a las familias, e insiste en que el dinero debería haberse utilizado para reducir las cuotas de material.
De los 300 euros de media que la aFFaC estima que se destinan a las cuotas escolares de cada alumno en los centros públicos, 150 corresponden a la cuota de salidas, 100 a la cuota de material, y 50 más para la reutilización de libros y licencias digitales. Con el incremento de las mismas, Tascón alerta de que se produce un doble efecto: las familias más vulnerables no pueden pagarlas y, consecuentemente, como el material es socializado y se comparte entre todo el centro, el resto de familias se ven obligadas a pagar más. Según datos de la asociación, las familias que no pueden asumir las cuotas son entre un 5 y un 10% en toda Cataluña, un porcentaje que dicen que se ha incrementado y que se agrava en los centros con más concentración de personas vulnerables.
En medio de este escenario y en un contexto de inflación, el Gobierno anunció un vale de 100 euros para el curso 2023-2024 para las familias con alumnos de primaria en centros públicos o concertados. El vale se puede canjear en establecimientos que fijó el Departamento de Educación por material de escritura, papelería, libros de texto, literatura infantil y juvenil, diccionarios, calculadoras, mochilas, estuches y juegos educativos, entre otros.
Sin embargo, una de las principales quejas que surgió entonces es que hay muchos centros que ya facilitan todo el material a las familias y lo cobran a través de las cuotas escolares. Estas familias, por tanto, no han podido usar el vale porque no se puede utilizar para el pago de las cuotas. «En la práctica, la medida no sirve para el ahorro de las familias, porque éstas pagarán 300 euros en cuotas y el vale lo gastarán en otras cosas», critica Tascón.
Desde la aFFaC ya pidieron a Educación que el dinero por alumno se hiciera llegar a los centros y que estos los utilizaran para reducir las cuotas. «Esto no se ha hecho, de manera que para la escuela pública esta medida no ayuda a las familias a evitar gastos ineludibles», sentencia.
Por el contrario, según indica Tascón, en algunos centros concertados las familias sí han podido utilizar los vales, dado que estos, por norma general, no socializan los libros y cada año vienen nuevos a los alumnos.
Las familias confirman el encarecimiento del material escolar y apuestan por reutilizarlo
Por su parte, las familias consideran que la subida de precios ha sido gradual, y que cuando suman todos los gastos, incluidos las cuotas escolares, es cuando realmente se percibe la diferencia entre un año y otro. «Los precios han ido subiendo de a poco, pero ahora podemos llegar a gastar unos 350 euros para la vuelta a la escuela», afirma Marta Galmés, madre de una niña que comenzará cuarto de primaria, en declaraciones a la ACN. Por su parte, Laura, otra madre con hijos en primaria, prefiere no calcular cuánto le supone la vuelta a la escuela: «Igualmente no me puedo escapar».
Una forma de ahorrar sería, según apuntan la mayoría de las familias, reutilizar más los libros de texto. «Soy madre de tres hijas y casi nunca he podido aprovechar ningún libro, es una de las cosas que más me indignan», lamenta Ariadna, una madre con tres niñas que estudian en centros concertados. Asimismo, cree que reciclarlos «tiene muchos beneficios para los niños». «Supone un gran aprendizaje para ellos, porque saben que cuando les den el libro, lo tendrán que cuidar y mantener para devolverlo», constata.
En este sentido, Ariadna critica que en las escuelas cada vez sean más habituales los libros «en los que se debe escribir», y que, por tanto, no se pueden reutilizar. «Son libros bonitos, pero muy caros, cuestan más de 30 euros, y si lo multiplicas son mucho dinero», denuncia. En la misma línea, también lamenta que el motivo principal de no poder compartir los libros entre hermanos son los cambios que las escuelas hacen en las editoriales de los volúmenes. «Parece que les interese más cambiar de editorial que no aprovechar los libros», sentencia.
Respecto al vale de 100 euros aprobado por el Gobierno para la compra de material escolar, las familias aseguran que «ayuda» pero que no es suficiente para cubrir todos los gastos. «Lo he gastado por los libros de primaria de los niños y para las mochilas, ya está», explica la Yariksa, madre de tres hijos. En la misma línea, Galmés afirma que habría preferido destinar el dinero del vale a la cuota escolar, y así reducir su importe: «Lo hemos intentado, pero no hemos podido».
La OCU eleva hasta los 500 euros el gasto por hijo por la vuelta a la escuela
Más allá de los datos de la aFFaC, que se centran en los centros públicos, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) estima que las familias gastarán de media unos 500 euros por hijo a la vuelta a la escuela este curso. Esto incluye las compras necesarias de ropa, cuadernos u otro tipo de material escolar y no tiene en cuenta otras partidas como la matrícula, las cuotas de la escuela, las extraescolares, el comedor o las cuotas del AMPA, que sumadas a las anteriores pueden superar los 2.000 euros al año por alumno de media.
En Cataluña, sin embargo, la media, según la OCU, es más alta y hace justo un año la organización advirtió de que la vuelta a la escuela en un contexto de inflación suponía un nuevo «golpe» para las economías domésticas precarias. Según los últimos datos disponibles, en 2022 la OCU estimaba que el gasto medio en Cataluña se elevaba a los 2.787 euros por hijo, mientras que en 2021 calculaba que el gasto era de 2.400 euros, por ejemplo. Por tanto, de un curso a otro el gasto medio aumentó en casi 400 euros.
Con todo, hay grandes diferencias según el tipo de centro y si es público, concertado o privado. En líneas generales, la OCU calculaba el año pasado que el coste anual medio en el caso de ir a una escuela o instituto público en España es de cerca de 1.000 euros, una cantidad que sube hasta los 2.700 si es un centro concertado y que puede superar los 6.000 si es privado.
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.