La asociación ASJUBI40, que reivindica la eliminación de los coeficientes reductores que penalizan la pensión de las personas jubiladas antes de la edad ordinaria, a pesar de haber cotizado por más de 40 años, ha comparecido en el Parlamento Europeo. Las fotos de ese acto representan el orgullo, pero también la vergüenza. El orgullo de unas personas que luchan por su dignidad y contra unas leyes injustas y discriminatorias. El orgullo de unas personas que empezaron a trabajar con 14 o 15 años, en trabajos de 40, 45 y hasta 48 horas semanales. El orgullo de quienes, con más de 65 años, se ven ahora obligados a defender en Bruselas lo que en España le han negado.
Pero esas fotos representan también la vergüenza de muchos partidos políticos que, a pesar de haber aprobado Proposiciones en 16 Parlamentos Autonómicos con la reivindicación de ASJUBI40, a la hora de la verdad nos han abandonado. Lo mismo puede decirse de los sindicatos mayoritarios. Actualmente, hay una Propuesta de Ley, ya aprobada por la Mesa del Congreso, pero que está siendo bloqueada desde hace más de un año por parte del Gobierno, impidiendo su debate democrático en el Congreso. Por esas mentiras y traiciones esa es también la foto de la vergüenza.
La discriminación que sufre ese colectivo es triple. Frente a las clases pasivas del Estado y los regímenes especiales como toreros, artistas, ferroviarios, etc. que pueden jubilarse con 59/60 años y 35 de servicio con pensión completa. También discriminación frente al régimen general de SS. Lo justo sería crear un nuevo régimen especial para personas con más de 40 años cotizados. Así de fácil. La legislación española, además, contraviene el principio fundamental de CONTRIBUTIVIDAD por el cual debe haber una relación equilibrada entre esfuerzo (años cotizados) y prestación (pensión). Otros países de la Comunidad SI establecen jubilación anticipada sin penalización según los años cotizados.
A la excusa de políticos y tertulianos que se limitan a decir “esto es lo que establece la Ley” hay que recordarles que las leyes injustas deben modificarse. Lo contrario es PREVARICACIÓN.
