Organizar el material de estudio es una de las claves para mejorar el rendimiento académico, ya seas estudiante de instituto, universitario u opositor. La preparación del entorno, los recursos y los consumibles influye mucho más de lo que parece en la concentración, la productividad y, por supuesto, en el presupuesto que destinamos cada mes.
A continuación te dejamos una serie de recomendaciones sencillas y efectivas para empezar el curso —o cualquier etapa de estudio— sin gastar de más y preparando todo lo necesario de forma inteligente.
1. Elige bien tus consumibles de impresión
Muchos estudiantes imprimen apuntes, ejercicios, trabajos o resúmenes. La elección de cartuchos puede marcar una diferencia enorme en el presupuesto del mes. Para quienes utilizan impresoras Canon, optar por cartuchos Canon de alto rendimiento permite imprimir más páginas con un coste menor, manteniendo una calidad más que suficiente para documentos académicos.
Si utilizas una impresora HP, también hay opciones muy económicas si eliges tinta para impresoras HP de proveedores de confianza, que ofrecen resultados consistentes para textos largos, gráficos o documentos de estudio.
2. Organiza tu espacio y tu material
A veces el gasto no viene tanto de lo que compramos sino de lo que perdemos o duplicamos por tenerlo todo desorganizado. Un buen sistema de clasificación con archivadores, carpetas y etiquetas puede evitar compras repetidas y ahorrar tiempo a diario.
Para equiparte con un kit básico y funcional, una buena opción es recurrir a tiendas especializadas que ofrecen precios ajustados y todo el material necesario reunido en un solo lugar. Por ejemplo, en tiendas como TiendaPapelería puedes encontrar material escolar online de todo tipo: blocs, lápices, bolígrafos, subrayadores, carpetas o estuches.
3. Planifica lo que realmente necesitas
No todo lo que aparece en las listas de material es imprescindible. Antes de comprar, revisa lo que ya tienes y haz un inventario rápido. Muchos estudiantes guardan en casa más bolígrafos, cuadernos o recambios de los que recuerdan.
También es recomendable comprar en packs cuando el ahorro sea real, sobre todo en consumibles de uso frecuente como papel, subrayadores o cartuchos de tinta.
4. Aprovecha herramientas digitales
Cada vez más alumnos alternan entre papel y digital. Las plataformas educativas permiten descargar documentos, revisar temarios o preparar trabajos sin necesidad de imprimir continuamente. Combinar ambos formatos es una excelente forma de ahorrar en consumibles sin renunciar a la comodidad del papel para estudiar.
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.





