La Audiencia de Barcelona ha condenado al exconsejero de Interior Miquel Buch a cuatro años y medio de prisión y 9 años y medio de inhabilitación para ocupar un cargo público y 10 y medio de inhabilitación absoluta por el caso del escolta de Carles Puigdemont.
El tribunal lo considera culpable de malversación y prevaricación por haber contratado como asesor a un mosso d’escuadra, el sargento Lluís Escolà. Una plaza que, como defendía la Fiscalía, era una tapadera para que pudiera hacer de escolta del expresidente. Por lo tanto, cree que la contratación fue irregular. A Escolà le condena a cuatro años de prisión y 9 de inhabilitación para ocupar cargos públicos y 10 años de absoluta.
«En tan solo un mes, está escrita una sentencia de más de 80 páginas. Sorprende esta agilidad y esta rapidez. Y, viendo cuál es el resultado de esta sentencia, que es condenatoria, de una forma injusta y muy bestia, da la sensación de que había mucha prisa por condenarme», ha asegurado Miquel Buch en TV3, a las puertas de la Audiencia de Barcelona, minutos después de conocer la decisión del tribunal.
El exconsejero de Interior presentará recurso en la misma Audiencia de Barcelona.
Puigdemont: «Es un acto de barbarie de España»
Carles Puigdemont ha calificado la sentencia de «acto de barbarie que ha hecho España con los jueces y los fiscales al frente». Y en el contexto de negociaciones para una eventual investidura de Pedro Sánchez, añade: «Si no han entendido por qué razón no renunciaremos nunca a la unilateralidad y a la independencia, y por qué desconfiamos del Estado español, aquí tienen una de las muchas que tenemos acumuladas».
